Sorprendente final para una historia que me ha tenido enganchado a sus páginas en la última semana, y que he valorado positivamente como lector. Como siempre, es de lectura fácil y entretenida, un thriller que cautiva al lector y que te hace pasar buenos momentos al lado de un buen libro.
Esta novela ha sido vendida en Amazon y en mi apreciación personal le concedo como nota un notable alto. Una buena lectura para este otoño.
Sinopsis: Anne tenía dieciocho años cuando desapareció durante la madrugada de la noche de San Juan de 2008, entre fuegos artificiales, hogueras, música y jolgorio, tras una fuerte discusión con su novio Mikel.
Han pasado diez años y la desaparición de Anne sigue siendo un misterio. No apareció. Ni viva. Ni muerta.
Pero
ahora es Mikel, atormentado por el pasado, quien desaparece dejando en
el aire muchas incógnitas. Antes de esfumarse sin dejar rastro, Mikel le
dejó un inquietante mensaje a su hermana Amaia, quien, dos meses
después, deja atrás su vida en París y regresa a Coaña, Asturias.
Amaia
no solo deberá enfrentarse a sus demonios, también a la oscuridad de
los otros, hasta resolver un rompecabezas repleto de muertes, ausencias y
secretos difíciles de asumir, al tiempo que le es imposible sucumbir al
encanto del primer amor.