Ahora estamos ante un thriller que esta escritora ha hilvanado muy bien, y que sirve para dar comienzo a la primera parte de la serie Los casos de Vega Martín. En líneas generales, he pasado un buen rato leyendo esta historia y la recomiendo a los futuros lectores.
Esta novela ha sido vendida en Amazon y en mi apreciación personal le concedo como nota un notable alto.
Maya Herrero se hizo conocida en 2002 por ser la amiga de la Dalia
Negra española. Un crimen macabro sin resolver del que aún se sigue
hablando diecinueve años después.
Oculta en el pueblo medieval de
Patones de Arriba, a una hora de Madrid, Maya ahora regenta una casa
rural y está casada con Nico, un reputado arquitecto. Pero Maya tiene un
secreto. En realidad, más de uno. A espaldas de su marido y en sus
ratos libres, investiga junto a un grupo que conoció en la Deep Web
desapariciones y asesinatos como los que en la actualidad está
cometiendo el asesino apodado el Descuartizador. Maya no sospecha que
algo tan inocente como aprovechar la ausencia de su marido para invitar
al grupo de ciberinvestigadores a su casa rural, la llevará a revivir el
pasado que tanto se había esforzado en borrar.
La inspectora
Vega Martín, acompañada del subinspector Daniel Haro y su equipo,
acudirán a Patones de Arriba para enfrentarse a uno de los casos más
extraños y violentos de sus carreras. Lo que Vega no espera, es que,
durante el proceso, podría llegar a perderse a sí misma.