martes, 18 de enero de 2011

"Los estados carenciales", de Ángela Vallvey.

Estamos ante la novela ganadora del Premio Nadal del año 2002. "Los estados carenciales", de Ángela Vallvey, es un libro que gira en torno a la búsqueda de la felicidad. Todos sus personajes la buscan a su manera.
El personaje principal de la novela es Ulises, abandonado por su mujer Penélope, vive con su hijo Telémaco. Penélope es una diseñadora de modas que decide refugiarse en su trabajo de diseñadora de modas y separarse de su marido y hijo pequeño. Un cambio drástico que deberá asumir Ulises por tener que cuidar de un hijo pequeño de seis meses, pero que a pesar de todo siempre quedrá a su mujer.
El suegro de Ulises, Vili tiene una Academia a la que acuden muchos personajes en busca de la felicidad. Tendrá que enseñarles a una pandilla de infelices que la felicidad consiste, como decía Platón, en hacer el bien. Así transcurren los acontecimientos, hasta que un día Vili tiene que cerrar la Academia al tener lugar en su interior un intento de suicidio. Ulises en el último momento desvía la trayectoria de la pistola del suicida que apuntaba hacia su propia cabeza. Vili entra en una depresión y decide viajar por el mundo.
Al final de la novela Ulises y Penélope deciden dormir juntos de nuevo y se vislumbra un atisbo de reconciliación a corto plazo. La autora nos deja con esa incógnita. El libro contiene numerosas reflexiones filosóficas y se le rinde, a mi manera de ver, un homenaje al mundo clásico.