sábado, 10 de diciembre de 2016

"El enigma de los vencidos", de Armando Rodera.

Otra buena novela de Armando Rodera que ha logrado entretenerme en los últimos días. Trata de un misterioso juego de mesa que hace que los jugadores recorran las calles de Madrid para encontrar las soluciones a las cuestiones planteadas.
Al mismo tiempo, se inserta en la novela la historia de David Sanromán,  que vuelve a Madrid tras quince años de destierro en Sudamérica, para heredar una tienda de antigüedades. Ahí encontrará este juego de mesa que le obligará a poner su vida en riesgo. También se cuenta un amor de su juventud y un accidente que cambió su vida para siempre.
Esta novela está siendo vendida por Amazon y en mi apreciación personal le concedo como nota un notable alto. Otro libro de Armando Rodera que no me ha decepcionado.
Quizás esta novela tenga muchas similitudes con el cuento infantil de Jumanji, que fue escrito en 1981 por el escritor estadounidense Chris Van Allsburg y en 1995 el libro fue adaptado a una película del mismo nombre. Pero ambas novelas tienen muchas diferencias y ambas tienen mi aprobación por su atractivos argumentos.
Sinopsis: David Sanromán, joven español nacido en los años de posguerra, vuelve a Madrid tras quince años de destierro en Sudamérica. Después de una dura infancia y de una adolescencia prometedora, tuvo que huir siendo un imberbe debido a sus desavenencias con la familia Fournier, causa de sus desdichas a lo largo de su vida. A su regreso, y tras hacerse cargo de un negocio heredado en el centro de Madrid, descubre un increíble juego de mesa que le obligará a poner su vida en riesgo.
Con la inestimable colaboración de su amigo Pedro y de dos adolescentes vecinos del barrio, deberá desentrañar las casillas del juego, obligándole a resolver los diferentes enigmas que les llevarán a alcanzar su objetivo: encontrar el verdadero tesoro de los vencidos.
Ayudados de su inteligencia, corazón y habilidad, recorrerán los más famosos sitios del Madrid de siempre, acechados en la sombra por malvados perseguidores. Tendrán que poner todo de su parte para llevar su cometido a buen término, ya que la recompensa no es poca: hacerle justicia a la verdadera historia del país que los vio nacer.