viernes, 10 de enero de 2014

"Intemperie", de Jesús Carrasco.

Dicen los críticos que "Intemperie" es la novela española del año 2013. Movido por estos comentarios tan elogiosos me he sumergido durante dos días en su lectura pero sin resultados positivos. El libro está bien pero no es para alabarlo tanto.
El ritmo narrativo es muy lento, el autor se detiene a menudo en describir circunstancias que realmente no merecen la pena. Se echa de menos un ritmo narrativo más ágil y dinámico.
El protagonista es un niño que huye por el campo perseguido por un pederasta (el alguacil), y que encuentra refugio y protección en un anciano pastor. Este es el hilo argumental de una historia que ha servido para rellenar más de 200 páginas.
Además, su final es incierto y está inconcluso. Te deja un mal sabor de boca, ya que no se sabe si al final el niño encuentra refugio en los bosques del norte o por el contrario es capturado debido a los asesinatos que han tenido lugar. La respuesta a esta pregunta se queda en el aire.
De todas formas, a este libro le otorgo un aprobado por el interés que logra despertar en el lector. La novela ha sido editada por Seix Barral.
Sinopsis: Un niño escapado de casa, escucha, agazapado en el fondo de su escondrijo, los gritos de los hombres que le buscan. Cuando la partida pasa, lo que queda ante él es una llanura infinita y árida que deberá atravesar si quiere alejarse definitivamente de aquello que le ha hecho huir. Una noche, sus pasos se cruzan con los de un viejo cabrero y, a partir de ese momento, ya nada será igual para ninguno de los dos.