sábado, 26 de mayo de 2012

"El mapa del tiempo", de Félix J. Palma.

Novela de aventuras con buena ambientación de la época victoriana. Aquí el escritor Félix J. Palma trata un tema muy cacareado como son los viajes en el tiempo, y para ello nos cuenta en clave de ficción la vida del escritor inglés H. G. Wells en el siglo XIX.
La historia comienza en Londres en 1896. Innumerables inventos hacen creer al hombre que la ciencia es capaz de conseguir lo imposible, como demuestra la aparición de la empresa de Viajes Temporales Murray, que abre sus puertas dispuesta a hacer realidad el sueño más codiciado de la humanidad: viajar en el tiempo, un anhelo que el escritor H.G. Wells había despertado un año antes con su novela "La máquina del tiempo".
De repente, el hombre del siglo XIX tiene la posibilidad de viajar al año 2000, como hace Claire Haggerty, quien vivirá una historia de amor a través del tiempo con un hombre del futuro. Pero no todos desean ver el mañana. Andrew Harrington pretende viajar al pasado, a 1888, para salvar a su amada de las garras de Jack el Destripador. Y el propio H.G. Wells sufrirá los riesgos de los viajes temporales cuando un misterioso viajero llegue a su época con la intención de asesinarlo y arrebatarle la autoría de una novela, obligándolo a emprender una desesperada huida a través de los siglos.
Al final, se descubre que la empresa Viajes Temporales Murray es un fraude y tan sólo se trata de una interpretación teatral a cargo de un grupo de actores. Por otra parte, Andrew Harrington no viaja realmente al pasado, a 1888, para salvar a su amada de las garras de Jack el Destripador, sino que H.G.Wells lo engaña en alianza con su amigo y prepara otra actuación teatral para parecer que viaja al pasado y mata a Jack el Destripador.
La novela cuenta como cierto que un viajero del tiempo viaja al siglo XIX para matar a H.G.Wells y hacerse autor de sus futuras novelas, pero Wells recibe a última hora una carta de su yo en el futuro, y logra finalmente salvar su vida y permanecer en el siglo XIX. En definitiva, una buena historia en la que se mezcla la ciencia ficción y un homenaje a los escritores que la iniciaron a finales del XIX.