domingo, 9 de enero de 2011

"Todo es silencio", de Manuel Rivas.


"Todo es silencio", de Manuel Rivas, toca las redes del contrabando en Galicia de una manera directa e incisiva. En Brétema, en la costa atlántica, hubo un tiempo en que las redes del contrabando, reconvertidas en narcotráfico, alcanzaron tanta influencia que estuvieron muy cerca de controlarlo todo: el poder social, las instituciones, la vida de sus gentes.
Los protagonistas de la novela son Fins, Leda y Brinco, que exploran la costa gallega a la búsqueda de lo que el mar arroja tras algún naufragio, el mar es para ellos un espacio de continuo descubrimiento. El destino de estos jóvenes estará marcado por la sombra odiosa y fascinante a un tiempo del omnipresente Mariscal, jefe de los narcos y dueño de casi todo en Brétema.
En la novela su autor describe el mundo que rodea al narcotráfico, con la corrupción existente en la policía y el enorme poder que aglutinan los narcos, al ser dueños de una inmensa fortuna que sirve para comprar personas y todo lo que se encuentren por delante. Al final, muere acribillado a balazos el contrabandista, Brinco, y finaliza la novela sin haber apresado la policía al principal jefe, Mariscal.